Ruta. Almonte, Hinojos, Chucena, Aznalcóllar, El Álamo, El Madrono, Berrocal, La Palma, Bollullos, Almonte.
!Hola
amigos! !Qué de tiempo sin vernos! Pues ya estamos de nuevo aquí pasadas
las vacaciones con renovados bríos.
Como a
estas alturas del calendario las pistas por las que circulamos siempre están
con mucho polvo, decidimos salir hoy por carreteras de tercer orden. Así que
Manolo Sánchez, Suárez, Martín y yo, Gonzalo estábamos a las nueve de la manana
en la gasolinera.
Salimos
en carretera pero nos volvemos en la circunvalación a ponernos más abrigo
porque hace fresco en una manana nublada y sin viento. Luego carretera a
Hinojos. Cruzamos el pueblo y bajada hasta la nacional Sevilla-Huelva. En el
cruce a la izquierda y llegamos a Escacena. En la primera rotonda carretera a
Aznalcóllar. La carretera está como hemos comentado en otra ocasión, con más
“lunares” que un traje de gitana. Pasamos por Tejada la Nueva y llegamos a la
provincia de Sevilla. Lo notamos porque el firme de la carretera se vuelve liso
y bien pintada. Luego de algunos kilometros llegamos a Aznalcóllar. Por el
camino nos hemos cruzado con numerosos ciclistas que aprovechan una manana
espléndida para pedalear, unos en grupo y otros en solitario.
A la llegada a Aznalcóllar buscamos en sitio para desayunar con churros.
Nos indican que en el mercado y en busca de él nos damos un paseo turístico por
el pueblo y vemos su biblioteca y su Ayuntamiento. Dejamos las motos en su
pequena placita … !oh sorpresa! ...
?Dónde está el mercado?
Sólo una pequena lápida en el interior de un
solar con una hermosa valla nos indica que aquí estuvo en tiempos el mercado.
Queda solamente un puesto de churros que ponen café, pero a estas horas ya se
acabó la masa, así que tostadas para todos.
Rato de charla. La manana empieza a estar soleada y nosotros que no tenemos
prisa.
Luego salimos y en el cruce tiramos a la derecha para El Castillo de las
Guardas. La carretera estrecha y revirada nos lleva hasta el pantano de El
Agrio. En el cruce nos desviamos a la izquierda hacia El Álamo. Hay 26 kilómetros pero se
nos antojan muchos más. La carretera llena de curvas con subidas y bajadas
continuas.
Estamos en plena sierra. Pasamos junto a un CEDEFO como el que hay
junto a Cabezudos pero éste tiene dos helicópteros operativos. Más adelante
vemos a lo largo de varios kilómetros, primero por la derecha de la carretera y
luego por la izquierda, una finca con cercada de piedras perfectamente
colocadas. Se me asemeja a una muralla china en miniatura.
Después de un hermoso recorrido de sierra, llegamos a El Álamo, una pequena
aldea… pero no estaban ni John Wayne, ni Richard Widmark, ni forajidos, ni
nada. Así que nos sentamos tranquilamente en un banco a su entrada y estuvimos
un rato de animada charla.
Después atravesamos la aldea y por el mismo tipo de carretera llegamos a El
Madrono. Aquí no entramos y seguimos hasta Berrocal. Nos paramos en el otro bar
de su plaza y nos comentan de una concentración~garbanzada con motos que van a celebrar para el día 10 de
noviembre. Nos lo pensaremos.
Ratito de charla con una cervecita delante y luego carretera hasta La Palma llena de curvas pero
de un firme excelente. Atravesamos y nos fuimos al polígono de La Palma donde Manolo compró
“combustible”(sus caramelos preferidos) y atravesando Bollullos cogimos la vía
de servicio de la autopista y a las tres del mediodía ya estábamos en casa con 140 kilómetros entre
pecho y espalda. Como nos habíamos tomado ya la cervecita de rigor, “cada
mochuelo a su olivo” y esta crónica se acabó.
Perdonad los errores de escritura (enes, signos…) pero me cambiaron de
ordenador y éste no hay quien lo entienda… Problemas de la edad… ¡Del
ordenador, no te confundas!
¡Hasta la próxima! ¡Saludos!
Sábado, 29 de septiembre de 2012.
Ruta: Almonte, Manzanilla,
Paterna, Tujena, Paterna, Villalba, Bollullos, Almonte.
Nuestra
intención para hoy era ir por pistas hasta Paterna para ver una carrera
ciclista. Así que salimos Martín, Suárez y yo, Gonzalo. El pronóstico del
tiempo para hoy anunciaba lluvia. La mañana amaneció nublada y nos lo pensamos
si salir o no. Al final Martín nos convenció y decidimos salir. Pasamos por la
gasolinera para repostar y en la circunvalación del pueblo nos volvemos por
ropa de más abrigo y algún que otro paraguas por si acaso.
Salimos en
dirección a Los Huertecillos. La pista bien de firme y “blandita” por las
últimas lluvias. Entrada en los pinares de El Tableao y en el primer cruce giro
a la izquierda. Me doy cuenta entonces que no me funciona el cuentakilómetros.
Seguimos por el pinar que es una gozada de paisaje con las primeras lluvias del
otoño y en siguiente cruce giramos a la izquierda en dirección a la carretera
ecológica Hinojos-La Palma. Aparecen tímidos rayos de sol que duran poco. Antes
de llegar al cruce nos encontramos con tres ciclistas desorientados que
requieren nuestra atención. Pretenden llegar a Almonte pero no saben el camino.
Suárez les da instrucciones y al despedirnos uno de ellos nos dice:
-¿Ustedes
tienen una página web?... ¿No?... Porque yo os he visto y leído vuestras
crónicas. Y tú eres Gonzalo…¿no?
Les
decimos que pueden participar con sus comentarios con nosotros y les deseamos
que disfruten del paseo.
Luego en
el cruce con la carretera giramos a nuestra izquierda en dirección La Palma y tomamos el segundo
cruce a la derecha (el primero lleva a Chucena). La pista está arreglada con
materiales de carretera, está bien de firme y discurre entre olivos. Nos lleva
a atravesar la autopista y meternos en un eucaliptal que nos va a acompañar
algunos kilómetros. Luego en el arroyo se une a la viene desde Chucena y nos
acompaña con bastantes baches hasta Manzanilla.
A la
llegada buscamos en la carretera un quiosco de churros y en un bar cercano desayunamos. Son las once de la mañana. No
llueve ni hace frío.
Después de
un buen rato de charla decidimos emprender camino en dirección a Paterna por
carretera. En cuanto pasamos por encima de las vías del tren Huelva-Sevilla
tomamos el desvío a la izquierda. Nos va a llevar hasta las afueras de Paterna
junto a su gasolinera, dejando el pueblo a nuestra derecha.
Cogemos
carretera en dirección a Tujena y pasada la gasolinera nos desviamos a la derecha y nos encontramos
con la XII Ruta
de BTT Sierra de Paterna. Ya viene alguno de los ciclistas que han hecho “la corta”. Enfilamos la ruta en
sentido contrario y despacito nos vamos cruzando con ciclistas y ciclistas. Por
lo visto la inscripción en la prueba supera los 1200 participantes. Así
despacio llegamos a Tujena. Aquí la Guardia Civil no nos deja seguir y tomamos un
atajo por medio de olivos que nos va a llevar hasta la pista que lleva a La Pata del Caballo por donde
vienen infinidad de ciclistas. Nos paramos cerca de una hora viendo pasar
corredores y corredoras.
Luego
seguimos a los ciclistas y nos volvemos hasta la entrada de Tujena. A su derecha tomamos una vereda de cabras que
nos lleva a la carretera hasta Paterna. Nos colocamos en el mismo punto del
principio y vemos llegar ya a los de “la larga”. Una cuesta arriba que los
acerca a la meta. Hay algunos exhaustos por el esfuerzo. Otros haciendo
estiramientos para seguir.
Buscamos
la meta en el centro de Paterna y nos metemos “en tó el mogollón”. No os podéis
imaginar la de ciclistas que abarrotan el centro. Unos llegando, otros en cola
a recoger camisetas y vales para la comida y otros que ya marchan.
Como se
iba haciendo tarde decidimos volver. Salimos en dirección a Tujena, tomamos la
primera pista a la izquierda y nos fuimos hasta la pista que recorre todos los
pueblos de la campiña. Giramos a la izquierda y varios kilómetros hasta el
cruce de Villalba. Atravesamos el pueblo y cogimos el camino que hace la Hermandad para Almonte
hasta la carretera ecológica. Giro a la derecha y enseguida a la izquierda
metiéndonos en una vereda que nos va a llevar por “un ojo de la autopista”, un
eucaliptal con bastante arena y un pinar, hasta una buena pista que nos mete en
Bollullos.
Desde aquí
por el camino de la
Hermandad de Bollullos cercano al arroyo nos encajamos en
Almonte a las dos y veinte del mediodía con 86 kilómetros de
recorrido.
Hoy no
hemos faltado a nuestra cita en el bar de la piscina para la cervecita de
rigor. Lo teníamos decidido desde que abandonamos Paterna.
Recuerdos
para los que faltaron y se lo perdieron y … ¡Hasta la próxima!